Hoy queremos hablaros de un estupendo pescado que es el Virrey. Caracterizado por sus escamas de color rojo o rosado, y al que también se le conoce como cachucho (por el monte submarino situado en el mar Cantábrico) o dorada hembra. Se puede cocinar de muchas maneras diferentes, como a la plancha, a la parrilla, al horno o en salsas.

La carne del virrey es muy blanca y finísima con una textura turgente, parecida a la de los peces de roca ya que suelen vivir en los arrecifes de corales de profundidad. Su sabor es amariscado.

Esta vez os proponemos preparar este estupendo pescado a la donostiarra para que el sabor del ajo acompañe a esta carne suave y fina. Si quisieras hacer esta receta para cuatro personas, estos serían los ingredientes que necesitarías: 1 virrey, 3 o 4 patatas (para acompañar), 4 – 5 dientes de ajo, 1 – 2 guindillas (al gusto), 20 ml de vinagre de sidra o vino blanco, AOVE, sal.

El primer paso es que en nuestra pescadería nos corten el virrey por el medio y en lomos. A ser posible quédate con su cabeza que, gracias a sus jugos, le dará mucho sabor al plato. Cuando ya estemos listos para cocinar lo primero que vamos a hacer es marcar el pescado y hornear las patatas. Para marcar el pescado lo hacemos en una sartén con aceite, ponemos el pescado con la piel hacía arriba durante 3 minutos. Marcamos y reservamos.

Las patatas las cortamos en panadera y las colocamos en una fuente con aove y sal. Las dejamos en el horno entre 15 y 20 minutos a 180º o 190ºC. Cuando este tiempo haya acabado, pon el pescado sobre la cama de patatas, pero esta vez la piel hacía abajo y deja todo junto en el horno 15 minutos más.

Mientras el horno hace su trabajo, a nosotros nos toca pelar en laminas el ajo y la guindilla para que se doren con aove en una sartén a fuego lento. Cuando tengan todo dorado, retira la sartén del fuego y echa los 20ml de vinagre o vino blanco y muévelo para que se junten todos los jugos. Por cierto, si quieres evitar que pique mucho, retira las semillas de la guindilla.

Pasados los 15 minutos, saca del horno la fuente de patatas con el virrey encima y echa el contenido de la sartén por todo el pescado para que se impregne bien de este delicioso sofrito y su sabor. Y ya tendrías tu fantástico virrey a la donostiarra, listo para hincarle el diente. ¡Qué aproveche!